domingo, 21 de marzo de 2010




"...acelerar es poner una meta a las espaldas, e ir para adelante..."


A veces el ejercicio de la afirmación
se impone como una cosa,
siempre ahí evidente no aguardando
nada sino es más de ella misma:
esto es lo que vengo a decir
estoy en paz con mi biografía.
¿A qué velocidad límite habrá que reducir
el acelerador de partículas
para alcanzar un umbral de quietud semejante?
Nunca me interesó la creación de la materia
lo que me asombra es su permanencia
Nunca me interesó cómo llegué hasta acá
lo que me preocupa es convertir este punto
en un trampolín que me eleve a cualquier lado.
A veces es necesaria una dosis
de fundamentalismo categórico:
una frase elegante y desafiante,
una frase surfeando en la precisa punta de garfio
de la ola más imponente de un maremoto
mientras las ciudades y sus certezas
se relamen en su destrucción inminente.
Estoy en paz con mi biografía
Y no sé cuál es la velocidad exacta requerida
para que la materia alcance una relajación absoluta,
pero tengo mi sospecha: es la misma
con la que se mueve mi pecho
mientras inspiro una bocanada de aire tibio
cierro los párpados
y expiro.

-el núcleo de las cosas debería ser una bocha de crema del cielo-

5 comentarios:

Florencia dijo...

Rama sin necesidad de que te agrandes por favor te pido que no te agrandes, pero lo tengo que decir cuando algo es genial hay que decir:

GENIAL!!!!!!!!

Florencia dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ramacciotti dijo...

GENIAL...tu comentario.
Don´t worry, si hay algo que no tengo es la capacidad de agrandarme por mi escritura. Por ej, el orgullo por este poema luego de tu comentario me debe haber durado cinco minutos; al sexto ya estaba auto-flagelándome por "errores" que veo en el poema por doquier. Mi perfeccionismo confabula para tener a raya mi capacidad de agrande.

Thanks igual por cinco minutos de orgullo!
P.d: cuando alguien suprime un comentario, mi paranoia se pega un viaje marca Acme. Sépanlo...

Florencia dijo...

Sabés q la paranoina debe ser geminiana, y confabulo con la gente que nos hace sentir esa paranoia, entocnes te cuento que yo suprimi el comentario y era porque era el mismo q el anterior y se puso dos veces por "artimañas" de blogger.

pd. de nada, lo merece proq lo lei varias veces y me sigue gustando.

Profetas de la Multiplicación dijo...

Eh demonio Rama, utilizaré la siguiente frase para mis justificaciones pragmatistas, presume toda una simpática moral:
"Nunca me interesó cómo llegué hasta acá
lo que me preocupa es convertir este punto
en un trampolín que me eleve a cualquier lado".