domingo, 5 de julio de 2009



A LAS MOCHILAS LAS CARGA EL DIABLO SÓLO EN LAS CALLES DE BAJADA



Eso que aparece sobre nuestra cara es un recuerdo:
aferrémonos a su lomo para luego dejarnos caer.
Por ejemplo, ahí, atrás de dos cuerpos gorditos
sentados en posición india, las piernas cruzadas
como dos budas de chocolate mirando el televisor 14 pulgadas
en el que dos militares desenfrenados
arrojan bolas de formas y colores variados
para asesinar personajes que le vienen al choque.
Por un momento podríamos medir los 30 centímetros
que separan a los nenes de la pantalla,
pero aparece repentinamente un GAME OVER
como un insulto de neón y los dos bajan las cabezas:
los budas gorditos, y los militares fibrosos.
No hay distancia ya entre la T.V y ellos,
es momento de tomar al vuelo el recuerdo
marcharnos lo más prontamente posible de ahí.

Eso que dejamos atrás nuestro ya no nos pertenece,
o nos pertenece de un modo que nadie sabría explicar.

-evolución humana-

3 comentarios:

luli dijo...

iInfancia.

sensación de viaje a otro tiempo que nunca existió como el mundo de los video juego; una ficción de lo que fue nuestra niñez, encerrados en casa.

vincent price hablándome por la espalda frente a una pared gris húmedo.

ya te lo avisé. me robo, descaradamente, los dos últimos versos.

Grado Cero dijo...

Los dos últimos versos son una trompada en el labio inferior.

Evolucionar, ojalá.

Yararán dijo...

ohh! budas y game over